Isabel, una censista con garra, pasión y voluntad http://wp.clicrbs.com.br/censo/ - Brasil

Cléber Ramos, un supervisor del IBGE, cuenta en su blog el trabajo que hay por detrás de los mas de 12 mil empadronadores que desde el 2 de Agosto recorren a pie, de casa en casa el Estado de Rio Grande do Sul en la inmensa tarea de contar cuántos son y cómo viven los Brasileros.

26 años de matrimonio, dos hijos, curiosa, le encanta caminar, residente del centro de Porto Alegre y con muchas ganas de ejercer su papel como ciudadana. Así defino a Isabel Weschenfelder censista, encargada de recolectar el censo en casi 400 direcciones en el distrito central de la capital Gaúcha. La invité a tomar un café cerca del centro, para conocerla. La conocí. El entusiasmo de Isabel por el trabajo es proporcional al número de palabras que pronuncia.

Según Isabel, el centro tiene características únicas que la ciudad se reserva, que sólo aquellos que viven o circulan por el lugar conocen. Entre edificio y edificio, en medio del fárragoso andar, se encontró con gente e historias increíbles, además de amistades especiales. "Yo soy una residente del centro y estoy acostumbrada a la multitud y el entusiasmo de aquí, pero nunca pensé que había tanta soledad y carencias en los hogares que visité," dijo, refiriéndose a que muchas veces tenía que hacer de compañía y ofrecer un hombro a los desahogos de los residentes. "Algunas personas lloran cuando me ven. Termino por emocionarme ", me dijo.

Weschenfelder es lo que llamamos una típica censista, siempre dispuesta a hacer todas las entrevistas del Censo sin resistirse a las dificultades. Con un horario de trabajo flexible, censa de día y de noche, especialmente los fines de semana. "Cuando no encuentro a la gente en su casa, dejo mi teléfono e incluso estoy dispuesta a ir a sus lugares de trabajo para hacerle la entrevista. Para mí, no hay ningún impedimento. Por el contrario, sólo motivación ", agregó.

Le pregunté por el ruido, la seguridad y capacidad de respuesta de la gente, tratando de encontrar una desventaja de su rutina en el Centro, pero nada la desmotiva. Apenas un portero, en uno de los edificios del centro, no le quiso cooperar, pero Isabel no quiso hacer hincapié en eso porque los demás sindicos de edificios y porteros, después de todo un sindicato, habían sido tan amables que no valdría la pena puntualizar sobre un solo incidente. De hecho, ella me pidió que agradecer públicamente en el blog en su nombre, a la señora Claudette, a los superintendentes locales, que fueron tan comprensivos con ella, y le agradeció a todos los síndicos que reconocen la importante labor del encuestador en la realización del Censo. Ella misma es subsíndica el edificio donde vive y, obviamente, les ha contado a sus colegas acerca de las visitas de los encuestadores.

Me preguntaba cómo es posible organizarse para ella con ese cuaderno en que guarda tantas notas durante las visitas. Es un cuaderno lleno de números, nombres, gráficos, colores, etc. que según dijo, era para no perderse en medio de tantas personas e historias. "Anoto todo aquí. Tengo listas de las personas que ya han respondido, las que la falta que respondan, las que me pidieron que volviera y las que nunca me abrirán la puerta. Si no fuera por mi cuaderno, me perdería en medio de tanta información ", añadió.

Más tarde, Isabel confesó que se ha olvidado de su cuaderno de notas en una de las casas que censó. En ese momento, había sido invitada a ver la novela "Passione" por la dueña. "Me volví loca buscando. Casi lloré. Pero los residentes, que ahora es mi amiga, me llamó para dármelo. Hoy, cuando lo recordamos, nos reímos juntas ", dijo , mientras se reía sola.