El poder de los mapas del delito: Revelando conexiones entre crimen, sociedad civil y desarrollo sostenible
Los mapas del delito son visualizaciones de datos georreferenciados que permiten acceder a información detallada sobre la distribución geográfica de la criminalidad en un determinado territorio.
La tendencia refleja la necesidad de los vecinos por unirse y por reportar a su comunidad, haciendo frente a las actividades delictivas.
Con estos mapas se produce información valiosa para dar apoyo por medio de vecinos afectados por la inseguridad y asistido por fuerzas del orden en áreas con altos índices delictivos como homicidios, robos, violencia familiar, entre otras capas temáticas de información.
Las visualizaciones geográficas del delito muestran la distribución geográfica de diferentes tipos de delitos y su frecuencia, lo que puede ayudar a identificar patrones y tendencias. Además, proporcionan datos sobre zonas conflictivas, áreas de mayor incidencia delictiva, y patrones de criminalidad urbana.
Los mapas del delito son herramientas co-creadas entre fuerzas policiales y ciudadanos para identificar áreas de riesgo, planificar estrategias de seguridad, y tomar medidas preventivas para abordar eficazmente la delincuencia en la zona afectada.
Existen diversos tipos de mapas utilizados por vecinos para informar incidentes violentos o robos. Es posible encontrar diversos desarrollos en plataformas en línea en ciudades y zonas urbanas en t|odo el mundo. Estas aplicaciones permiten a los usuarios compartir en tiempo real alertas sobre delincuencia y seguridad en sus comunidades.
Estos son algunos ejemplos de mapas reportados por vecinos para denunciar incidentes:
- El Mapa del Delito en Bahía Blanca es una herramienta de descripción gráfica que permite visualizar de manera integral la problemática de la seguridad en la ciudad. Este mapa geolocaliza los delitos en la ciudad con el objetivo de orientar la prevención, generar políticas públicas en zonas críticas y mejorar la eficiencia en la distribución de recursos para abordar la seguridad. Además, busca ser una herramienta transparente y activa para comprender y gestionar de manera más efectiva los recursos de la ciudad en relación con la seguridad pública.
- El sistema Data-Crim en Perú, basado en datos procesados por el Instituto Nacional de Estadísticas e Información (INEI) genera el mapeo de delitos y es manejado por la Policía Nacional del Perú para visualizar y analizar los datos de criminalidad en el país. El sistema está diseñado para ayudar a la interfaz entre la sociedad civil y la policía en la gestión de la información y el análisis del delito. El sistema muestra la distribución de los delitos por tipo y subtipo, como contra la vida, el cuerpo y la propiedad, en diferentes jurisdicciones. El objetivo del sistema es identificar patrones y tendencias en la criminalidad para ayudar a las autoridades a desarrollar estrategias focalizadas para reducir el delito y mejorar la seguridad pública.
- Robos de paquetes entregados en domicilios: El Departamento de Policía de Dallas solicitó la ayuda de la ciudadanía para identificar a un hombre que hurtaba encomiendas dejadas en entradas de hogares, solicitando a cualquier persona con información a ponerse en contacto. El sospechoso fue captado en cámara robando un paquete de la terraza de uno de los vecinos y estos se defendieron haciendo denuncias en línea y reportadas en la aplicación Neighbors. El ladrón fue detenido después de encontrar varios paquetes robados en su casa.
- Nextdoor, por su parte, es una aplicación de redes sociales diseñada para conectar a vecinos y comunidades. Es utilizada para fortalecer a alarmas comunitarias manteniendo informados a los vecinos sobre tendencias delictivas locales y problemas de seguridad. Los usuarios pueden compartir alertas y actualizaciones sobre actividades sospechosas, incidentes delictivos o preocupaciones de seguridad, y también pueden conectarse con agencias policiales y fuerzas locales de aplicación de la ley para recibir actualizaciones. La aplicación está disponible en muchos países, incluidos los hispanoparlantes, y se centra en noticias locales y participación comunitaria.
Es posible crear mapas del crimen utilizando diversas fuentes de datos y herramientas. Por ejemplo, el sitio web Numbeo ofrece índices de delincuencia que pueden utilizarse para comparar ciudades en función de los niveles relativos de delincuencia, seguridad, la ley y el orden. Estos índices tienen en cuenta factores como las percepciones de la gente sobre el nivel de delincuencia, los cambios recientes en los niveles de delincuencia, la seguridad al caminar solo, el miedo a atracos o robos, la seguridad de los vehículos, la amenaza percibida de asalto y/o agresión, ser molestado, acosado, insultado o solicitado por los lugareños, la intolerancia racial, étnica y religiosa, y la amenaza de robo de propiedad.
Por su lado, la UNODC (Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito) produce índices de criminalidad y violencia a nivel agregado, que incluyen indicadores relacionados con el crimen organizado, pandillas, tasas de homicidios y el impacto de las armas de fuego en las comunidades. Estos índices se utilizan para medir la prevalencia e impacto del crimen y la violencia en diferentes regiones y países. También sirven para apoyar a los responsables de políticas y agencias de aplicación de la ley en sus esfuerzos para prevenir y responder al crimen.
El trabajo de muchas organizaciones de la sociedad civil en esta área está estrechamente vinculado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en particular al Objetivo 16, que tiene como objetivo promover sociedades pacíficas e inclusivas, garantizar el acceso a la justicia para todos y construir instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles.
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